Leopoldo Sucre Figarella

Nació en Tumeremo, (Estado Bolívar), el 1 de agosto de 1926, hijo de José Manuel Sucre e Inés Matilde Figarella.

Realizó estudios de bachillerato en el liceo Peñalver, de Ciudad Bolívar. Luego marchó a Caracas, para cursar su educación superior, obtuvo el título de Ingeniero Civil en la Universidad Central de Venezuela.

Fue un ingeniero de amplia trayectoria en la gerencia pública del país, ocupando cargos de gran relevancia para el desarrollo industrial venezolano, como ministro de Obras Públicas y de Comunicaciones, posteriormente como presidente de la Corporación Venezolana de Guayana.

Con la caída de la dictadura de Marcos Pérez Jiménez en el año 58, Leopoldo Sucre Figarella es llamado a formar equipo con el Presidente Rómulo Betancourt quien lo designa luego de ganar la elecciones de 1959, Gobernador del estado Bolívar, desde donde impulsó el nacimiento de Santo Tomé de Guayana, hoy Ciudad Guayana.

A partir del año 1960 es designado Ministro de Obras Públicas, cargo que ejerció también durante el período del Presidente Raúl Leoni, quien lo ratificó en el cargo hasta el final de su período en el año 1969.

Desde el Ministerio de Obras Públicas, Figarella impulsó obras de gran importancia y significación para el país tales como: el puente Angostura en Ciudad Bolívar, el puente Rafael Urdaneta sobre el Lago de Maracaibo, el distribuidor La Araña, la autopista Tejerías-Caracas, la Av. Boyacá en Caracas, se inician y adelantan igualmente los trabajos del metro de Caracas y se concluye la ampliación del aeropuerto internacional Simón Bolívar, entre muchas otras.

En 1984 es nombrado presidente de la Corporación Venezolana de Guayana, en esta posición, impulsa el desarrollo de la Región de Guayana de manera extraordinaria, concluyendo e inaugurando la central hidroeléctrica "Raúl Leoni" (Guri) (Actualmente “Central Hidroeléctrica Simón Bolívar” **) las autopistas Ciudad Bolívar-Ciudad Guayana y Ciudad Guayana-Upata; las carreteras El Dorado-Santa Elena de Uairén y Ciudad Bolívar-Caicara-Los Pijiguaos, incluyendo puentes sobre los ríos Caura, Cuchivero, Suapure, Parguaza y Caroní. En su gestión se dieron curso a las obras de las centrales eléctricas "Macagua" (Actualmente “Central Hidroeléctrica Antonio José De Sucre” **) y "Caruachi" (Actualmente “Central Hidroeléctrica Francisco de Miranda” **) y se ampliaron las capacidades de las empresas básicas de la región: Sidor, Ferrominera, Venalum, Alcasa e Interalumina. Asimismo, durante su gestión se mejoró la infraestructura sanitaria de la región, con la construcción de los hospitales de Caicara, El Callao y Santa Elena de Uairén, también de justicia (palacio de justicia de Cd. Bolívar y Cd. Guayana), así como para el deporte (estadio Cachamay y el inicio del estadio La Ceiba), y el sector agrícola (construcción de silos la Kina en la Paragua y ampliación de los de Ciudad Bolívar).

** El 31 de marzo del año 2006, el Presidente de la República, Hugo Rafael Chávez Frías, en el decreto Nº 4.412 en su Artículo 1, procedió a modificar a partir de esa fecha.

La obra de infraestructura de Leopoldo Sucre Figarella, se encuentra diseminada por toda la geografía nacional y es sin lugar a dudas la más grande y útil construida por la democracia.

Cabe destacar que en el año 1974-1979 ejerció el cargo de Ministro de Comunicaciones, desde donde inició un proceso de modernización de las telecomunicaciones y correos, se construyó durante su gestión el centro postal de Caracas.

En cuanto al plano familiar, contrajo nupcias con Cruzana Ortega, mujer de gran temple y su más fiel colaboradora, de cuya unión nacieron sus hijos Leopoldo, Francisco y José Manuel quienes siguiendo la huella de su padre obtuvieron el grado de ingenieros, conformando así con su ejemplo a la nueva Venezuela que su distinguido progenitor ayudó a construir.

Es bueno recordar siempre a éste insigne batallador de la democracia, quien con su férreo carácter se ganó algunos adversarios, pero su inquebrantable amor por su país, su desprendimiento y su terco afán al trabajo le plenaron de admiradores y que con el paso del tiempo su obra se agiganta al igual que la sombra del tepuy cuando el sol se oculta.

Fuente Informativa: www.faja360.info.ve